Tuesday, April 2, 2019

Ayudas gubernamentales para el auto-empleo y la microempresa como la forma para emerger de la pobreza: ejemplos internacionales, cómo Medellín lo está haciendo bien y cómo podría mejorar

Artículo de opinion por: Maria Camila Vargas de la Hoz (email: mvarga24@eafit.edu.co)

El auto-empleo y la microempresa constituyen en Medellín alrededor del 33% del empleo de la ciudad. En el país, las cifras oscilan entre el 30-50% de la población empleada. Este tipo de iniciativas contribuyen a la dinamización de la economía, disminuyen la tasa de desempleo (aunque los empleos generados sean en su mayoría informales), y son motores de oportunidades para las generaciones dependientes de estos autoempleados, que se benefician de los ingresos generados por sus negocios ampliando sus posibilidades de éxito y de ascenso en la escalera social.
Los efectos positivos sobre las tasas de desempleo y la economía sumados a las presiones internacionales han motivado a los gobiernos a tomar iniciativas apoyando el auto-empleo y el emprendimiento, con miras hacia la formalización y la generación de valor.

Las iniciativas más populares para fortalecer el auto-empleo y el emprendimiento son:
  • Inversión de capital en fases de incubación y fortalecimiento
  • Programas gubernamentales de asesoría y consultoría a pequeños empresarios
  • Educación técnica y vocacional gratuita

Ejemplos internacionales:
Sudáfrica, la tercera economía del continente africano, a través de su sistema NFET (siglas en inglés para Educación y Capacitación No Formales), ha logrado fortalecer su fuerza productiva capacitada, promoviendo la formación de pequeñas empresas y auto-empleados.

Los programas de educación del sistema NFET integran habilidades técnicas con una base fuerte en administración; duran entre seis meses y un año, y se continúa el acompañamiento a los egresados con asesorías y talleres trimestrales para actualizar sus conocimientos y apoyar en la incubación de sus emprendimientos. Las instituciones que ofrecen programas NFET buscan también promover la colaboración entre los estudiantes: que si hay 100 personas estudiando para ser peluqueros, no se creen 100 peluquerías pequeñas y débiles, sino que se generen alianzas para la creación de empresas fuertes, sostenibles y diferenciadas.

Los cursos que se brindan con mayor frecuencia son tecnología para agricultura, cuidados para el adulto mayor, administración de empresas, computación y tecnologías de la información, diseño de modas y sastrería, peluquería y avicultura.

Celestine Mayombe, académica de la Universidad de Pretoria, afirma en su estudio del 2017 que los efectos positivos del acceso ampliado a la educación se ahogan en la incapacidad de los egresados para hacer la inversión inicial para sus emprendimientos, incluso cuando pueden invertir en un mínimo producto viable, esta inversión no es suficiente para garantizar el éxito, sostenibilidad y diferenciación del proyecto. Acceso a productos financieros adecuados, y estrategias de apoyo económico públicas y privadas son recomendables para no dañar el impulso que la educación otorga a las personas.

En Suecia, los Subsidios para el Desarrollo Empresarial Regional, entregados en el marco del Programa Sueco de Desarrollo Empresarial Regional, constituyen una ayuda gubernamental en la forma de bonos que permiten al tenedor elegir al proveedor de servicios de consultoría empresarialque requiera.

Los servicios de asesoría profesional por parte de una empresa privadatienden a ser de calidad superior y más personalizados que los servicios de asesoría personalizada brindados por entes gubernamentales, esto se debe a que las empresas privadas consiguen atraer con sus salarios a profesionales de mayor categoría, y a que siendo la consultoría la razón de ser de su negocio tienen la experiencia, herramientas, tiempo y disposición para brindar a sus clientes una atención integral y efectiva. Además, la consultoría provista por el estado no compite con ninguna otra empresa, por lo que no se ve motivada a brindar un servicio especializado, mientras que las consultorías privadas compiten por medio del éxito de sus clientes.

La doctora en economía Barbro Widersted de la Universidad de Umea, concluyó en su estudio del 2015 que las empresas que obtuvieron los bonos para consultoría y los usaron, tuvieron en promedio un crecimiento mayor que el de las empresas que no recibieron estas ayudas. Este crecimiento se debió a un mejor uso de sus factores de producción y a los efectos positivos de la consultoría en su eficiencia técnica.

Lecciones para Colombia


El 25 de septiembre del 2015, la Asamblea General de las Naciones Unidas reconoció la educación adulta y la capacitación como un factor determinante en el logro de la Agenda de los Objetivos del Desarrollo Sostenible; recordemos el objetivo 4: “Garantizar una educación incluyente, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vidapara todos”.

Mayombe, la académica de Sud-África afirma que la educación no formal y los programas de capacitación y entrenamiento para adultos desempleadospueden ser efectivos en la creación de auto-empleos y el fortalecimiento de los mismos al convertirlos en micro-empresas que continúen su crecimiento.

Así, brindar oportunidades gratuitas a los adultos para educarse con calidad es especialmente importante en países donde la pobreza obliga a los niños y jóvenes a desertar de la educación primaria y secundaria.

El SENA y demás instituciones que ofrecen programas de educación incluyentes, así como los programas de la Alcaldía de Medellín como Formación para el Trabajo, pueden aprender del enfoque que la iniciativa Sudafricana hace hacia la cooperación, así como su formación en administración que es transversal a todos los programas educativos.

La integración de estas instituciones con otras que brinden apoyo en la financiación y el fortalecimiento de los emprendimientos (especialmente aquellos de alto impacto, innovadores, diferenciados, generadores de empleo y de valor agregado) es clave para disminución de la pobreza y para lograr un efecto integral en la comunidad.

Sin dejar de resaltar la labor de los entes gubernamentales y mixtos en Medellín, cabe invitar a estos programas a considerar el ejemplo sueco por lo menos de forma tangencial. Las asesorías brindadas por el estado y por organizaciones público-privadas, tienden a cometer errores de estandarización e implementan rígidos programas que obligan a potenciales empresas disruptivas a pasar por el mismo proceso de emprendimientos poco innovadores.

Lew Perren, profesor en la Escuela de Negocios Brighton (Inglaterra), identifica cuatro factores clave para el crecimiento de las micro-empresas:
  1. Motivación del dueño para crecer
  2. Experiencia en la gerencia del crecimiento, clave para ejecutar las estrategias necesarias para el crecimiento
  3. Acceso a factores productivos (capital, tecnología, talento humano)
  4. Demanda por los productos o servicios ofrecidos por el microempresario
Perren concluye en su artículo de 1999, que las micro-empresas necesitan iniciativas personalizadasque satisfagan sus necesidades reales, en lugar de iniciativas estandarizadas y burocráticas que resulten en pérdida de tiempo y de oportunidades.

Perren hace énfasis, en que las ayudas no deben ser demasiado prescriptivas, con el empresario siendo instruido en cómo el negocio debería ser llevado, ya que esto conlleva al riesgo de alienación del micro-empresario y a que el abordaje demasiado formal y estandarizado resulte en una falta de adaptación al contexto específico de la micro-empresa. Aún más importante, señala Perren, estas las ayudas paternalistas y prescriptivas no empoderan al dueño, sino que simplemente abordan los problemas puntuales, negando al micro-empresario oportunidades de aprendizaje y dejándolo dependiente de la ayuda de un externo.

Se hace evidente entonces la necesidad por entender mejor el contexto y las dinámicas del micro-empresario y auto-empleado colombiano, región a región, ciudad a ciudad, y empresario a empresario, para generar estrategias integrales y coherentes que ayuden a potenciar el crecimiento económico del país y el bienestar de sus ciudadanos.

 ¿Qué está haciendo Medellín? iniciativas de la última administración


La Alcaldía de Medellín a través de la Secretaría de Desarrollo Económico (SDE), ha desarrollado en los últimos años programas dirigidos a fortalecer las pequeñas empresas y a formar a los ciudadanos en habilidades relevantes para el mercado laboral. Algunos de estos programas son:
  • Los Centros de Desarrollo Económico Zonal, que acompañan con asesorías personalizadas, cursos, charlas y talleres a los emprendedores y empresarios en fases de incubación y pre-incubación. 
  • En alianza con la Cámara de Comercio, el programa “Medellín Ciudad Clúster”, que busca la colaboración entre diferentes empresas para la mejoría en la productividad y competitividad de sectores estratégicos de la ciudad (moda, salud, turismo de negocios, construcción, energías sostenibles y desarrollo digital)
  • El concurso Capital Semilla, que otorga financiación en fases tempranas del emprendimiento.
  • La Tienda Medellín: establecimiento móvil donde se comercian productos de emprendedores de la ciudad, ubicada en grandes eventos de la ciudad, eventos empresariales, internacionales y edificios de administración pública. 
  • Formación para el trabajo: programa que otorga becas para estudiar técnicas y tecnologías y que promueve el bilingüismo por medio de cursos gratuitos. 

Referencias

  • Departamento Administrativo Nacional de Estadística. (2018). Gran Encuesta Integrada de Hogares. 2018 [Database] 
  • Mayombe, C.  (2017) "Success stories on non-formal adult education and training for self-employment in micro-enterprises in South Africa", Education + Training, Vol. 59 Issue: 7/8, pp.871-887, https://doi-org.ezproxy.eafit.edu.co/10.1108/ET-08-2016-0130
  • Perren, L. (1999) "Factors in the growth of micro‐enterprises (Part 1): developing a framework", Journal of Small Business and Enterprise Development, Vol. 6 Issue: 4, pp.366-385, https://doi.org/10.1108/EUM0000000006691
  • Rona-Tas, A. & Sagi, M.  (2005), Entrepreneurship and Self-Employment in Transition Economies, in Lisa A. Keister (ed.) Entrepreneurship (Research in the Sociology of Work, Volume 15) Emerald Group Publishing Limited, pp.279 – 310
  • Widerstedt, B. & Månsson, J. (2015) "Can business counselling help SMEs grow? Evidence from the Swedish business development grant programme", Journal of Small Business and Enterprise Development, Vol. 22 Issue: 4, pp.652-665, https://doi-org.ezproxy.eafit.edu.co/10.1108/JSBED-06-2012-0073